Cristina Castañer
Cada vez que miran al cielo la preocupación es mayor: aves que hace tan solo unas décadas invernaban en África ahora se quedan en España, mientras que otras que lo hacían en nuestro país se han desplazado más al norte. Es una evidencia más del cambio climático, el que transforma progresivamente los hábitats poniendo en peligro la migración de algunas aves. Expertos ornitólogos alertan del peligro del calentamiento global, pero no es la única amenaza. La basuraleza, el abandono de residuos en su entorno natural, es otra de las más flagrantes y las aves marinas son las que más sufren su impacto: “En la actualidad, el 90% de las aves marinas han ingerido plástico y, de seguir así, el número llegará al 99% en 2050”, afirma Pep Arcos, biólogo y coordinador del Programa Marino de SEO/BirdLife.
La golondrina, el gorrión o la perdiz roja también están en la lista de aves damnificadas por la basuraleza. “Pese a que la adaptación biológica permite a los organismos vivos sobrevivir a los cambios, muchas veces no es suficiente para evitar la desaparición de especies en los ecosistemas contaminados por basuraleza”, avisa Miguel Muñoz, técnico de medio ambiente y coordinador del Proyecto LIBERAen SEO/BirdLife.
Identificar y cuantificar la presencia de productos contaminantes provocados por la basuraleza
Las aves son el grupo de animales del que más datos hay registrados, lo que las convierte en indicadores clave del estado de salud del planeta, además de ser las grandes protagonistas de las labores de conservación de SEO/BirdLife, la ONG ambiental decana en España, y un referente en la defensa del medio ambiente también en Europa. “Para nosotros, sí o sí, es el socio necesario. Porque no hay un movimiento con estudios científicos tan sólidos y rigurosos, y porque dispone con una red de voluntarios fundamental para ayudarnos en la sensibilización en torno a la basulareza”, asegura Sara Güemes, coordinadora del Proyecto LIBERA de Ecoembes.
El conocimiento es el primer eje de acción de LIBERA, que en 2018 presentó una iniciativa pionera para evaluar el impacto del abandono de residuos en espacios de alto valor ecológico, entre ellas las marismas del Guadalquivir, las Islas Cíes, los Montes de Toledo o las Bárdenas Reales. En total, 140 IBA (Áreas Importantes para la Conservación de las Aves y la Biodiversidad), de las 469 que existen en España, son la referencia para identificar y cuantificar la presencia de productos contaminantes provocados por la basuraleza. “Desde residuos sólidos hasta pesticidas, es importante saber su procedencia y comportamiento para determinar el grado de afectación en estos entornos. Nadie ha planteado un >estudio tan extenso como este que hacemos junto al CSIC, lo que demuestra que la ciencia no es estanca, también está para colaborar”, explica Muñoz.
Tras la recogida de muestras de agua, sedimento, tierra y heces de animales silvestres, técnicos del Centro Superior de Investigaciones Científicas se encargan de analizar la presencia de fitosanitarios, metales pesados, derivados de plástico y medicamentos. Es la manera que tiene el Proyecto LIBERA de obtener datos fiables y mapear la presencia de estos materiales abandonados en la naturaleza, para averiguar su efecto negativo sobre la biodiversidad.
La importancia de integrar investigación e información
Si a través de la investigación es posible encontrar soluciones eficaces y adaptadas, es importante también integrar la información generada por voluntarios y colaboradores. Así es cómo LIBERA da valor a la ciencia ciudadana, para incrementar el conocimiento y también para promover la educación ambiental y ganar en concienciación. Expertos como Ana Carricondo, coordinadora de Conservación en SEO/BirdLife, recuerdan que “la presencia dispersa de basura en casi cualquier ambiente se convierte en un fenómeno a veces invisible, pero de consecuencias impredecibles a gran escala”, por lo que es necesaria una metodología para clasificar los residuos durante las recogidas. “Los colectivos que participan en las campañas tienen que sentir que no solo limpian, sino que están aportando su granito de arena para terminar de colorear el cuadro de la basuraleza”, añade Güemes desde Ecoembes.
LIBERA nace de la alianza entre SEO BirdLife y Ecombes, por lo que cuenta con toda la experiencia de la organización ambiental decana en España en el estudio de las aves y de la biodiversidad. Junto al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) se está identificando y cuantificando la presencia de productos contaminantes en 140 Áreas Importantes para la Conservación de las Aves y la Biodiversidad (IBA).
Desde 2017 Libera organiza recogidas de ciencia ciudadana en diferentes ecosistemas, con el objetivo de que las agrupaciones salgan a caracterizar las basuras encontradas. La creciente involucración de asociaciones y colectivos, empresas y ayuntamientos de toda índole hace que los residuos caracterizados vayan en aumento, haya más conocimiento sobre lo que abandonamos en la naturaleza y poder tomar medidas:
Además de ofrecer programas de formación a los organizadores de las recogidas para que el grupo conozca más en profundidad el proyecto, también se apuesta por herramientas innovadoras como las aplicaciones móviles:
“No existe en Europa un proyecto tan pionero como LIBERA. Que dos organizaciones tan dispares, como SEO/BirdLife y Ecoembes, se unan por un objetivo común y juntas consigan hacer algo tan vasto es todo un ejemplo a seguir”, concluye Sara Güemes.