Seis razones para disfrutar del otoño en Castilla-La Mancha

Con la llegada del otoño, aparecen también las ganas de disfrutarlo en plena naturaleza. Castilla-La Mancha ofrece la zona volcánica más extensa de la Península Ibérica, varias cumbres que sobrepasan los 2.000 metros, algunas de las más bellas vías ferratas, las calmadas aguas turquesas de las Lagunas de Ruidera o la posibilidad de sobrevolar en globo castillos, molinos y dehesas. ¿Qué más se puede pedir?

Cruce de caminos desde tiempos históricos, Castilla-La Mancha atesora innumerables rutas y sendas de todo tipo, desde itinerarios de pocos kilómetros, perfectos para una mañana, a grandes recorridos, excelentes para realizar en diferentes etapas. Basten algunos ejemplos como el histórico Camino del Cid, que atraviesa buena parte del norte de Guadalajara, la Senda de Viriato (GR-63), la Vuelta a la Manchuela (GR-64), la ruta de los Pueblos de la Arquitectura Negra (GR-60), el Sendero del Río Mundo (GR-67) o los Caminos Naturales del Tajo y del Guadiana, en los que gozarás de la compañía de los dos principales cursos de agua de la comunidad.

Las Vías Verdes de Castilla-La Mancha son antiguos recorridos ferroviarios, sin apenas desnivel, perfectos para iniciarse en el cicloturismo en familia. Un ejemplo es la Vía Verde de la Sierra de Alcaraz, una de las más entretenidas, dada su longitud (74 km) y la diversidad de ecosistemas que atraviesa.

Aunque si se está en forma, nada como adentrarse en los espacios protegidos del Alto Tajo y la Serranía de Cuenca que ofrecen múltiples opciones, desde divertidas y cómodas pistas entre bosques teñidos por los bellos colores del otoño, hasta escarpados farallones rocosos.

Atendiendo al refrán “Por los Santos, nieve en los altos”, las primeras nevadas se acercan a las zonas de alta montaña de Castilla-La Mancha. Y es que aquí no es escaso el repertorio de “dosmiles”, tanto en el noroeste de Guadalajara como en la Sierra de las Cabras.

En concreto, en la Sierra Norte de Guadalajara se encuentra un extenso Parque Natural emplazado en las estribaciones del Sistema Central, que guarece, entre otras, a las dos cumbres más prominentes de la región: el Pico del Lobo (2.274 m) y El Cerrón (2.197 m). No muy lejos, algo más al sur y sin abandonar esta serranía, está también el Ocejón (2.049 m), formidable atalaya pétrea desde donde contemplar una de las mejores panorámicas de la Sierra de Ayllón.

Los amantes de la escalada encontrarán en Castilla-La Mancha un verdadero paraíso. Una muy buena opción es la hoz del río Gritos, en tierras conquenses, cerca de Valeria, y su importante yacimiento romano. Los escarpes y cortados calizos de esta hoz fluvial resultan perfectos para practicar la escalada, con vías de todos los niveles. Eso sí, salvo que se cuente con mucha experiencia, es imprescindible ir con guías profesionales. En la región no faltan empresas de turismo activo que organizan actividades de escalada, ofreciendo el equipo necesario para descubrir los mejores lugares y disfrutarlos con total seguridad.

Fuera de los calurosos meses estivales también se pueden practicar deportes náuticos. Una buena propuesta es navegar en las tranquilas aguas de inverosímiles tonalidades del Parque Natural de las Lagunas de Ruidera, ya sea en piragua o en paddle surf. Aunque el catálogo de actividades náuticas, añadiendo otros deportes como vela o windsurf, también está disponible en los embalses de Bolarque y Entrepeñas, al oeste de Guadalajara; en el embalse de Buendía, en la provincia de Cuenca; y en Toledo, en el embalse de Cazalegas.

Un ascenso en globo un día despejado donde deleitarse con los colores del otoño puede ser una de las vivencias más inolvidables. Especialmente, sobrevolando parajes tan asombrosos como el castillo de Calatrava la Nueva, los molinos de viento de Consuegra o de Campo de Criptana, las dehesas del Valle de Alcudia y Sierra Madrona, las hoces del Cabriel o el casco histórico de Cuenca y sus cortados rocosos.

Para los más intrépidos, nada como el salto en parapente desde La Muela de Alarilla. En el entorno de este inmejorable balcón natural, desde el que se divisa gran parte de la provincia de Guadalajara, hay varias empresas especializadas que organizan vuelos para todas las edades y niveles. ¿Qué mejor plan para disfrutar de la naturaleza en todo su esplendor?