Alcohol y drogas al volante, un cóctel letal: “maté a una persona y a otra la dejé gravemente herida”

“Me llamo Carlos, tengo 30 años y llevo dos años, un mes y 15 días en la cárcel”. Así comienza su impactante relato a cámara Carlos Rubio, un joven que arruinó su vida después una noche de fiesta en la que condujo tras haber ingerido alcohol.

“Estoy aquí porque casi mato a dos personas y a una tercera la maté, que era mi amigo, Juan Antonio. El alcohol me hizo que fuera más deprisa de lo normal. Íbamos de risas, sin prestar atención, me salí en una curva y me di contra un coche de frente. Maté a mi amigo, dejé a una persona gravemente herida en el hospital, casi pierdo una pierna, perdí el trabajo, a mi mujer… e indemnizaciones para toda la vida”, continúa Rubio.

La historia del joven se enmarca dentro de ‘El Apagón’, una campaña de concienciación promovida por La Fundación Abertis, que busca alertar a los jóvenes de los peligros de conducir tras haber bebido alcohol o consumido drogas.

"Piensas que controlas"

El vídeo con la historia de Carlos se mostró por primera vez en 2017 en dos conocidas discotecas de Madrid y Barcelona. Sin previo aviso, ambas salas cortaron la música y lo proyectaron en sendas pantallas. Los asistentes, atónitos, solo pudieron enmudecer para escuchar el duro mensaje del joven: “Piensas que eso no te puede pasar a ti. Que controlas, que solo son un par de copas, pero sí, te puede pasar a ti también si bebes y coges el coche”.

Tras el éxito cosechado en aquella ocasión en las citadas ciudades, la acción se ha ido repitiendo en otras localidades españolas como Valencia, Salamanca e Ibiza. Este año, la Fundación ha decidido internacionalizar la campaña, llevándola primero a Italia y, próximamente, a Chile, donde la celebración de las fiestas nacionales está a punto de empezar. “La buena acogida que ha tenido la acción entre los jóvenes a la salida de las discotecas donde hemos realizado esta acción nos lleva a pensar que funcionará también en otros países”, asegura Sergi Loughney, director de la Fundación Abertis.

Mezcla letal: alcohol, drogas y carretera

La preocupación de la Fundación Abertis por la tasa de siniestralidad vinculada al consumo de este tipo de sustancias no es baladí. Según el informe 2018 del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, cuatro de cada diez conductores fallecidos en accidentes de tráfico el año pasado había consumido alcohol, narcóticos o psicofármacos. En el caso de los peatones analizados fallecidos, el porcentaje se sitúa en el 38,5%.

Y son precisamente los jóvenes el grupo poblacional en el que se hallan el grueso de defunciones, siendo las franjas de edad de 25 a 34 años y de 35 a 44 años en los que se ocasionó el mayor número de fallecidos.

En el caso de los conductores, llama poderosamente la atención la mayor responsabilidad de ellas: el 94,4% de las víctimas que había consumido cannabis y cocaína o tomado alcohol fueron hombres, frente al 5,6% de mujeres. Dentro de estas infracciones, el consumo de alcohol se alza con la medalla de oro, apareciendo en un 61,2% de los positivos, bastante por delante de las drogas (44%) o los psicofármacos (25%).

Cuatro de cada diez conductores fallecidos en accidentes de tráfico en 2018 había consumido alcohol, narcóticos o psicofármacos

Cabe destacar que, mientras la intoxicación por alcohol en las víctimas mortales —tanto conductores como peatones— ha descendido casi un 5% en los últimos diez años, en drogas se ha incrementado en nueve puntos en el mismo periodo, sobre todo en lo referente a positivos por cannabis (la sustancia más consumida en 2018) y cocaína.

El análisis del Instituto Nacional de Toxicología considera positivo la presencia de cualquier droga sin tener en cuenta la cantidad y, en caso del alcohol, una concentración en sangre superior a 0,3 gramos por litro. Recordemos que el límite legal en sangre se estable en 0,5g/l en sangre para los conductores generales y en 0,3g/l para nóveles y profesionales.

Si bebes, no conduzcas

2018 dejó un total de 751 víctimas mortales en la carretera. 535 conductores, 143 peatones y 73 acompañantes. Entre el medio millar de personas fallecidas que iban al volante, 232 lo hicieron bajo los efectos del alcohol o las drogas. Unos datos que ponen de manifiesto que el conocido lema ‘si bebes, no conduzcas’, popularizado por el cantante Stevie Wonder en la década de los 80, sigue sin calar entre buena parte de la población española. No en vano, doce de cada cien conductores admiten que cogen el coche después de consumir alguna sustancia psicoactiva.

Los datos revelan que muchos son jóvenes que se ponen al volante durante los fines de semana, tras una noche de juerga. De ahí que la Fundación Abertis haya puesto el foco en ellos con campañas como ‘El Apagón’, con la que pretenden mostrar los riesgos y las letales consecuencias de adoptar una conducta irresponsable. El objetivo no es otro que hacer nuestras carreteras más seguras, reduciendo la siniestralidad y evitando que se arruinen vidas.