El transporte es una necesidad. Ya sea por ocio o por trabajo, los ciudadanos nos pasamos el día de un lado para otro, moviéndonos constantemente. Para ello, el tren es el medio elegido por miles y miles de viajeros cada día, por muy diversos motivos. El tren es rápido, es fiable, es cómodo y es limpio. Pero una buena empresa ferroviaria ha de contar con unas determinadas características para cumplir con las necesidades y exigencias de sus clientes.
Los viajeros tienen cada vez más claro qué es lo que esperan de una compañía de tren de confianza, y si además alguna de ellas ofrece atributos exclusivos que la diferencien de las demás en su beneficio, mejor que mejor. Pues un compromiso de puntualidad, un amplio abanico de destinos o un gran número de trenes y servicios pueden marcar la diferencia en un mercado cada vez más competido.
A estas alturas, una de las características que los viajeros esperan de un buen servicio ferroviario es poder contar con trenes de última generación y equipados con la tecnología más actual. Para que esto sea así, en España Renfe cuenta con una moderna y versátil flota en constante renovación que ofrece la máxima seguridad, comodidad, amplitud y accesibilidad en sus trenes. Con ello no solo garantiza la fiabilidad de su servicio y el confort de sus viajeros, sino también los mejores tiempos de viaje del mercado y la mayor eficiencia energética.
El ferrocarril es verde, y es que de todos los medios de transporte colectivos que se mueven por el mundo, el tren es con diferencia el más sostenible y el que mejor cuida el planeta. Es el que menos dióxido de carbono emite por kilómetro recorrido, y eso es algo que los viajeros tienen cada vez más en cuenta. En España, el compromiso de Renfe hace que la incidencia negativa en el medio ambiente sea de 20 a 30 veces menor que la de otros medios de transporte. Y además, el 80% de la energía de la totalidad de sus trenes es eléctrica y proviene al 100% de fuentes renovables con origen certificado.
En el mundo del ferrocarril, la experiencia es un grado. Y no ya solo a la hora de dar forma a una red de trenes que nos llevan de un sitio a otro, sino al conocer y cuidar las necesidades de los viajeros. En este caso, Renfe, con sus 80 años de historia, tiene a sus espaldas una larga trayectoria en la que ha ido depurando su servicio. Nadie sabe mejor lo que necesitan los viajeros españoles y eso es algo que se deja ver en sus medidas de confort y en su personal humano a bordo de los trenes.
La elección de un medio de transporte está fuertemente condicionada por la confianza que su servicio transmita al viajero, y en eso el ferrocarril también puede destacar sobre los demás. Dentro del sector, y para marcar la diferencia, Renfe puede presumir de ofrecer unas determinadas características exclusivas que lo desmarcan de cualquier otro operador, aumentando así el grado de confianza entre sus clientes.
Según la compañía española, el 90% de sus viajeros que utiliza el tren por ocio y turismo valora muy positivamente la presencia de personal de Renfe en los trenes y en las estaciones. De modo que cuenta con más de 7.500 profesionales para atender, informar y hacer de sus viajes la mejor experiencia posible.
Una de las características más valoradas del ferrocarril es su puntualidad, y eso Renfe lo sabe. Los viajeros quieren y necesitan llegar cuando hay que llegar, y no más tarde de lo previsto afectados por retrasos que trastocan su agenda o sus planes. La distancia ya no se mide en kilómetros, sino en tiempo, y si ese tiempo se ve afectado por una falta de puntualidad, entonces el servicio no funciona como se espera de una experimentada compañía ferroviaria. Para que eso no pase, Renfe ofrece un compromiso de puntualidad que es garantía de fiabilidad.
Pero si las cosas no salen como deben, y no es posible esa puntualidad, Renfe ofrece una compensación económica hasta ocho veces superior a la exigida por la ley, y eso es algo que no facilita ningún otro operador del mercado. En el caso de sufrir esa falta de puntualidad en los trenes AVE, la compensación es del 50% del importe del billete por retrasos de 15 minutos e incluso del 100% si el tren llega 30 minutos más tarde de lo previsto. Los viajeros pueden reclamar online durante tres meses y las compensaciones se llevan a cabo en 24 horas y en dinero, nunca en vales.
Otra de esas características que debe ofrecer un buen servicio ferroviario es disponer de un amplio abanico de destinos. Y Renfe, con más de 1.500, es la compañía con mayor número de destinos. Cercanías, Media Distancia, Larga Distancia… Los servicios de Renfe cubren toda la geografía española para que todos los viajeros tengan la oportunidad de viajar en tren, facilitando así sus desplazamientos. Su red de Alta Velocidad va sumando destinos conforme avanzan las infraestructuras y las principales ciudades españolas se conectan de forma rápida y efectiva gracias a sus trenes de última generación.
Al ofrecer un gran número de destinos, los viajeros pueden recurrir a Renfe para descubrir nuevas ciudades viajando en Alta Velocidad y Larga Distancia, mientras que para los traslados que quedan más a mano los trenes de Media Distancia y Cercanías facilitan los desplazamientos del día a día. Además, el tren tiene la peculiaridad de que lleva a los viajeros de centro a centro de la ciudad, para que lleguen a su destino con toda la comodidad, ahorrando tiempo y dinero. De manera que Renfe ofrece una amplia oferta de destinos para que los viajeros no tengan más que elegir el origen y elegir el destino para viajar a donde sea que necesiten.
Un factor importante a la hora de viajar en tren es que no sea condicionante. Es decir, que sea capaz de adaptarse a las necesidades del viajero para que no tenga que ser el viajero el que se adapte al servicio. Y para eso, es fundamental ofrecer una alta frecuencia de trenes y una amplia variedad de horarios. Para conseguirlo, Renfe es la empresa ferroviaria de viajeros con mayor número de servicios, de destinos y de horarios, al ofrecer más de 300 trayectos diarios de larga distancia para viajar por toda España en trenes AVE, Avlo, Alvia, Euromed e Intercity. Al mismo tiempo que esa oferta se refuerza con billetes asequibles, flexibles y con las mejores condiciones.
Tan importante es la puntualidad como poder decidir cuándo viajamos, y más allá de la larga distancia, Renfe ofrece servicios públicos ferroviarios que el Estado considera esenciales, como las líneas de Cercanías y Media Distancia, tanto de ancho convencional como de ancho métrico. En este caso se llegan a contar más de 1.000 trenes que realizan al día 5.000 circulaciones para transportar a más de 1,3 millones de viajeros. De manera que ya sea para recorrer largas distancias, o para llevar a cabo los desplazamientos rutinarios del día a día, Renfe adapta su servicio para que encaje de la mejor manera posible con las necesidades del viajero.