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Ruta para conocer seis ciudades españolas de manera sostenible y segura

Paola Amigo | 21·diciembre·2020

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Rápido, efectivo, económico y, sobre todo ahora, seguro

Una pandemia no frena nuestras ganas de conocer nuevos sitios, nuevas ciudades, monumentos o restaurantes, sino todo lo contrario. Las incrementa. Y aunque de primeras suponga un plus de dificultad para el turismo urbano, la realidad es que aún podemos disfrutar de nuestras urbes con seguridad si sabemos cómo y tomamos todas las precauciones.

El transporte juega un papel fundamental al visitar un nuevo destino. A la hora de desplazarnos en una nueva ciudad, o al redescubrir la nuestra propia, lo ideal es hacerlo de forma rápida, efectiva, económica y, sobre todo ahora, segura. Por lo que las motos eléctricas compartidas pueden convertirse en excelentes aliadas para llegar a los atractivos más recónditos de una ciudad. Son ágiles en los centros urbanos y además sostenibles gracias a sus inexistentes emisiones de dióxido de carbono.

Con motos eléctricas compartidas podemos olvidarnos de llevar nuestro propio vehículo porque, con un motosharing como el de Acciona, cuando no tienes moto en realidad tienes cientos a tu disposición. Todas incluyen cascos, un gran báúl donde llevar tus cosas y cumplen con las más estrictas medidas de higiene y seguridad, con desinfecciones diarias, redecillas para que la piel no entre en contacto con el casco, toallitas, gel higienizante y folletos informativos.

Para descubrir una nueva ciudad en una de estas motos eléctricas compartidas solo es necesario registrarse en su App y tener carnet de conducir. Así podrás hacer turismo a tu aire y con libertad, sin contaminar e incluso desplazándote a zonas fuera del área de estacionamiento, lejos de los cascos urbanos, ya que siempre podrás pausar la tarificación de la moto durante el tiempo que necesites. Una vez hayas concluido tu vista no tendrás más que reanudar el viaje con tu moto hasta la siguiente parada del día. Algo que ya puedes hacer en ciudades como Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla, Valencia o Zaragoza.

Barcelona

Barcelona es la ciudad con el mayor parque móvil de motos de España, las motos son toda una cultura, por lo que todo son ventajas al movernos sobre dos ruedas por la Ciudad Condal. El área de servicio de Acciona es especialmente amplia aunque, si queremos salir de ella, tampoco habrá problema porque siempre podremos pausar la tarificación, visitar lo que deseemos y retomar después nuestro camino.

Si es tu primera vez en Barcelona, está claro que no te puedes perder el casco antiguo, con la Catedral (1) y el barrio Gótico (2), así como salir de él y llegar hasta la Sagrada Familia (3). Sin embargo, si te gusta el turismo de mercado, una buena opción sería pasar por los más famosos de la ciudad, como la Boquería (4), el de la Concepció (5), el de la Barceloneta(6), el modernista de Sants (7) o el colorido de Santa Caterina (8). Fáciles de conectar uno con otro si nos movemos en moto.

Para conseguir unas buenas vistas de la ciudad no hay mejor plan que recurrir al Teleférico de Monjuic (9) y así subir hasta lo más alto del emblemático monte de Barcelona. Para llegar a él podrás utilizar el Teleférico del Puerto, también llamado Aeri del Port, dejando tu moto en el Puerto de Barcelona (10) y viajar por el aire desde la Torre de San Sebastián (11) hasta el Mirador de Miramar (12), en la base de la colina de Montjuic, y ahí tomar el Teleférico de Monjuic. Tras tener Barcelona a tus pies no tendrás más que buscar otra moto para continuar tu visita.

Motos eléctricas de Acciona en Barcelona

© Acciona

Motos eléctricas de Acciona en Barcelona

© Acciona

Motos eléctricas de Acciona en Barcelona

© Acciona

Motos eléctricas de Acciona en Barcelona

© Acciona

Madrid

La agilidad, la libertad de movimientos y la rapidez de desplazamientos que ofrece una moto eléctrica, en una gran ciudad como Madrid es donde más lo vamos a agradecer. Además, al ser vehículos cero emisiones no tenemos ninguna zona restringida y podremos aparcar gratuitamente en toda la ciudad.

Además de recorrer el corazón más castizo, donde no debe faltar el Madrid de los Austrias (1) y la Latina (2), así como la Plaza Mayor (3) o el Mercado de San Miguel (4), la ventaja de movernos en una moto eléctrica es que podremos unir zonas tan distintas y lejanas como el Palacio Real (5) o el parque del Retiro (6) en unos pocos minutos.

Saliendo del Madrid más típico, el motosharing nos permitirá acercarnos a Madrid Río, uno de los espacios al aire libre preferidos por los madrileños en los últimos años, donde nos esperan puentes como el de Arganzuela (7) o las peculiares Pasarelas Cáscara (8), en cuyas bóvedas se encuentra el mosaico fotográfico más grande de Europa.

O incluso llegar hasta el Parque del Capricho (9), recientemente reformado por Acciona en la Alameda de Osuna, que alberga refugios antiaéreos de la Guerra Civil, la mayor fortificación subterránea realizada en Madrid. Una vez allí podemos pausar la tarificación de la moto y retomarla una vez que hayamos concluido nuestra visita.

Lago del Retiro

© Lucas Vallecillos | GTres

Motos eléctricas de Acciona en Madrid

© Acciona

Mercado de San Miguel

© Lucas Vallecillos | GTres

Plaza Mayor

© Jon Arrillaga | GTres

Málaga

Málaga, con su clima templado y costero, es una ciudad ideal para moverse en moto eléctrica, y con la flota de Acciona podremos visitar sus principales puntos de interés sin preocuparnos por el tráfico o el aparcamiento, tanto si somos turistas como locales redescubriendo la ciudad.

La Catedral (1)es uno de los grandes imprescindibles de Málaga, con sus estilos renacentista y barroco es uno de los monumentos más emblemáticos de Andalucía, y desde ella podemos aprovechar para recorrer la calle Larios (2), llena de vida todo el año. A tres minutos en moto está la Plaza de la Merced (3), donde se encuentra la casa natal de Picasso (4).

El plan perfecto para una tarde tranquila es subir al mirador de Gibralfaro (5), desde donde conseguir vistas sobre La Plaza de Toros, la Catedral de La Encarnación, el Puerto de Málaga, la Farola de Málaga y La Malagueta, para después bajar y al caer el sol tomarse algo en el Paseo del Muelle Uno (6).

Para salir de la ciudad sin abandonarla no tendremos más que buscar la moto de Acciona más cercana y poner rumbo o bien a playa del Palo (7), si buscamos relax y una buena oferta gastronómica, o bien al túnel de la Cala del Moral (8), un viejo túnel ferroviario que hizo de refugio durante los bombardeos de la Guerra Civil.

Catedral de Málaga

© Philip Lange | GTres

Vistas desde el Paseo del Muelle Uno

© Diana Matarranz

Motos eléctricas de Acciona en Málaga

© Acciona

Vistas de la ciudad desde el mirador de Gibralfaro

© Joris Van Ostaeyen | GTres

Sevilla

La moto eléctrica es el vehículo ideal para conocer Sevilla, una ciudad con un centro histórico estrecho y lleno de recovecos donde sobre dos ruedas podremos movernos a nuestro aire.

La Sevilla más clásica tiene unas paradas imprescindibles que sería un delito pasar por alto, como la Catedral y su Giralda (1), el barrio de Santa Cruz (2), el río Guadalquivir (3), el barrio de Triana (4), la Plaza de España (5) y el parque de María Luisa (6), por citar solo algunos de sus encantos. Lugares todos ellos en cuyas inmediaciones encontraremos algunos de los bares más típicos de la ciudad, donde las tapas también pueden considerarse otro monumento.

Si todo esto lo queremos observar desde arriba, nada como subir hasta el mirador del Metropol Parasol, más conocido como Las Setas (7), en la Plaza de la Encarnación, para contemplar la ciudad desde casi 30 metros de altura.

Lo bueno además de movernos en moto eléctrica es que podremos salir del centro más clásico y acercarnos a puntos menos turísticos, como el parque de Miraflores (8), lleno de huertos urbanos. O al parque del Alamillo (9) y el Monasterio de Santa María de las Cuevas (10) en la Isla de la Cartuja, el antiguo recinto de la Expo ’92 que será ‘cero emisiones’ antes de 2030. Si nos salimos de la zona de estacionamiento no es problema, ya que siempre podemos pausar la tarificación de nuestra moto y retomarla después de la visita.

Motos eléctricas de Acciona en Sevilla

© Acciona

Río Guadalquivir a su paso por la Torre del Oro

© Lucas Vallecillos | GTres

Plaza de España

© Paolo Gallo Modena | GTres

Vistas de Sevilla desde Metropol Parasol

© Lucas Vallecillos | GTres

Valencia

Valencia es una ciudad abierta al uso de la moto, su clima mediterráneo es una invitación para movernos sobre dos ruedas y las motos eléctricas compartidas de Acciona pueden ser la solución perfecta para movernos por la ciudad y conocer sus encantos de forma limpia y rápida.

Quien llega a Valencia por primera vez no puede pasar por alto la Catedral y su Miguelete (1), tan típicos como tomarse una horchata y unos fartons en la cercana Horchatería Santa Catalina (2). Las Torres de Serranos (3) son el mejor ejemplo del espectacular recinto amurallado que un día rodeó la ciudad. Al igual que la Lonja de la Seda (4), una obra maestra del gótico civil valenciano, es merecidamente Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Desde aquí hasta el Oceanogràfic (5), el Museo de las Ciencias (6), el Hemisfèric (7) y el Palau de les Arts (8) hay un paseo, así que buscar una moto cercana para ir hasta allí será una inteligente decisión. Una vez allí el Museo Fallero (9) está a tiro de piedra, en él podremos aprovechar para conocer todos los ninots indultados en fallas desde los años 30, y el Parque Guillivert (10), muy cerca también, con su monumental Gulliver de 70 metros puede despertar el niño que llevamos dentro.

Plaza del Ayuntamiento

© Lucas Vallecillos | GTres

Ciudad de las Artes y las Ciencias

© Paolo Gallo Modena | GTres

Mercado de Colón

© Lucas Vallecillos | GTres

Motos eléctricas de Acciona en Valencia

© Acciona

Zaragoza

El centro histórico de Zaragoza está lleno de vida y gastronomía, como en la zona de ‘El Tubo’ (1), y la mejor manera de llegar hasta sus callejuelas y movernos por ellas es una moto eléctrica compartida. Para muchos Zaragoza es conocida como ‘la ciudad del viento’, pero gracias a la agilidad de las dos ruedas podremos atravesar la ciudad en cuestión de minutos si así lo deseamos.

Como la Basílica del Pilar (2) es sí o sí uno de los lugares que debemos visitar, desde allí podemos comenzar la interesante Ruta de Goya, que nos llevará desde el Pilar hasta la Cartuja de Aula Dei (3), no sin antes pasar por el Museo Camón Aznar (4). Así, en una mañana, podremos conocer de cerca al más célebre pintor aragonés de todos los tiempos.

Para explorar una de las zonas más nuevas de la ciudad no tenemos más que acercarnos al recinto de EXPO Zaragoza 2008 (5), aparcar nuestra moto y pasar a descubrir el Acuario de Zaragoza (6), fluvial y con espacios destinados al Amazonas, al Ebro, al Mekong, al Nilo, al Darling y al Río Mundo, así como darnos un paseo por el Parque del Agua Luis Buñuel (7).

Basílica del Pilar desde el río Ebro

© Vichaya Kiatying-Angsulee | GTres

La Aljafería

© Philip Lange | GTres

Plaza 'La seo'

© Lucas Vallecillos | GTres

Puente del Tercer Milenio

© Francisco Javier Gil Oreja | GTres