La tipología energética que utilizan los medios de transporte, el uso masivo de los medios más consumidores y el crecimiento de los desplazamientos de los últimos años han hecho del tráfico rodado uno de los principales sectores causantes de las emisiones de CO2. Asimismo, según el Banco Mundial, unas 15.000 personas mueren en España cada año a causa de las enfermedades provocadas por la contaminación del aire. En concreto, el año pasado, la polución ocasionó en España un total de 14.689 muertes.
Por si no fuera poco, según la Agencia Internacional de la Energía, alrededor de 6,5 millones de personas muere cada año en el mundo a causa de la contaminación, y casi la mitad, 3 millones, lo hace como consecuencia directa de la polución derivada de las grandes ciudades.
Alternativa sostenible
Con el fin de potenciar la disminución en la contaminación provocada por el tráfico rodado, se están planteando alternativas a los combustibles tradicionales. Una de ellas es el Gas Natural Vehicular (GNV) , que en los próximos años puede convertirse en uno de los agentes clave para reducir los principales peligros medioambientales derivados de la movilidad.
El gas natural vehicular es una alternativa real que está permitiendo mejorar la calidad del aire de las ciudades ya que, comparado con un coche de gasolina o diesel, reduce en más de un 85% las emisiones de óxidos de nitrógeno y en casi el 100% las partículas en suspensión, principal causa de problemas respiratorios en niños y ancianos en entornos urbanos derivados de la contaminación urbana. También reducen un 24% las emisiones de CO2 por lo que esta energía contribuye en la lucha contra el cambio climático.
De hecho, una sustitución del 5% del parque de vehículos pesados y turismos de gasolina y diésel por un parque de gas natural en Madrid y Barcelona reduciría las emisiones de todos gases contaminantes hasta en un 5%, según el informe "Contribución del gas a la calidad del aire”, elaborado por Sedigas.
El GNV se comercializa en forma de gas natural comprimido (turismos), y como gas natural licuado para el transporte pesado
El GNV es el mismo que se emplea en la calefacción o producción de agua caliente, pero se suministra en unas condiciones especiales de presión y temperatura que permite la carga en vehículos. Se comercializa en forma de gas natural comprimido (GNC), para su uso en turismos, o como gas natural licuado (GNL), para el transporte pesado. Se utiliza ampliamente para flotas de vehículos que deben estar circulando continuamente. Sin ir más lejos, una gran parte de los autobuses y taxis de Barcelona y Madrid ya funcionan con GNV.
Combustible más barato y seguro
Más allá de las ventajas medioambientales, el gas natural es un combustible muy competitivo desde el punto de vista económico. El coste por kilómetro de un vehículo a gas es un 30% menor que con gasóleo y entre un 50% y un 60% menor que con gasolina. Si se reposta 20€ en el depósito de un coche de gasolina se recorren unos 383 kilómetros; con uno de gasóleo unos 493km; pero con uno de gas natural se pueden hacer más de 700 kilómetros.
Tanto a nivel nacional como de algunas comunidades autónomas, existen subvenciones en la compra y utilización de vehículos a gas natural
Por otra parte, tanto a nivel nacional como de algunas comunidades autónomas, existen subvenciones en la compra y utilización de vehículos a gas natural. El propio Gobierno aprobó este año el Plan Movea, destinado a subvencionar la compra de coches propulsados por energías alternativas, como el GNV. Tras el agotamiento de los fondos el pasado verano, el ejecutivo dio luz verde a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) al Plan Movalt, destinado igualmente al impulso del vehículo propulsado con energías alternativas y que entra en vigor a finales de noviembre (aunque las primeras operaciones no se podrán introducir en el sistema hasta el próximo 11 de diciembre).
Asimismo, en Barcelona y Madrid hay un 75% de descuento en el impuesto municipal de circulación. En Madrid, existe un descuento en aparcamiento en la zona SER y la posibilidad de circular por el centro durante las restricciones por contaminación. Y en Cataluña, cuentan con un descuento del 30% en los peajes de la Generalitat y pueden circular por el carril VAO.
El Vehículo a Gas Natural
Las marcas cuentan con numerosos modelos de vehículos a gas natural, pero también existe la posibilidad de transformar el propio para que pueda utilizar este combustible. En el segmento de ligeros, se pueden transformar para utilizar GNC los vehículos de gasolina de inyección indirecta a partir del año 2001, aunque será el taller el que deberá certificar la viabilidad en cada caso con la ficha técnica del auto. Este procedimiento se realiza en talleres especializados y consiste en la instalación de un kit homologado de transformación en el interior del vehículo que proporciona los elementos necesarios para que éste funcione con GNC como combustible. Si se acaba el gas natural, el coche consume gasolina de forma automática ya que conserva el depósito.
La operación tiene un coste aproximado de 2.000 euros, una inversión que queda rápidamente amortizada con las ventajas económicas que ofrece este combustible.
Para repostar, el proceso y el tiempo de repostaje para los vehículos a gas natural es igual que en un vehículo convencional y se realiza en dos o tres minutos. Los turismos disponen de dos bocas de repostaje diferenciadas, una para gas natural y otra para gasolina. En los vehículos transformados se reposta a través de una boca creada para tal efecto en la carrocería.
Los vehículos de gasolina de inyección indirecta se pueden transformar para utilizar GNC
El GNV en el transporte de España
Las principales ciudades españolas cuentan con un elevado número de turismos matriculados por kilómetro cuadrado. De acuerdo con sus cifras, Madrid tiene 2.300 turismos matriculados por kilómetro cuadrado; Valencia, 2.600 y Barcelona, 5.700. Unas densidades muy altas si se comparan con Berlín o Roma, donde hay 1.500 vehículos matriculados por kilómetro cuadrado, o Londres, que cuenta con 1.300.
En 2016, el 56,8% de vehículos que se matricularon fueron diésel, frente al 40,2% de gasolina y el 3% de híbridos, según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles Turismos y Camiones (ANFAC).
Turismos matriculados en España por KM2
Además, la antigüedad del modelo también es un factor contaminante. Un turismo diésel de 1992 emite 35 veces más partículas tóxicas que uno actual, y el doble de óxidos de nitrógeno. En España, el parque de vehículos ha sufrido un envejecimiento debido a la crisis. En 2015, la media de edad era 11,64 años, casi cuatro más que en 2005, que se situaba en los 7,8 años. Seis de cada diez coches tendrán más de diez años en este 2017, de acuerdo con un estudio de mercado realizado por la consultora MSI. Una década antes, tan solo uno de cada cuatro había llegado a esa edad. En Reino Unido, estos vehículos representarán este año el 35% de todo su parque, en Francia el 42% y el 50% en Italia, según los datos de la patronal europea de fabricantes de vehículos Acea.
Es por esta razón que, desde el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, se advierte de los beneficios del uso de modos de transporte más sostenibles. De hecho, cada vez son más los coches de gas natural que circulan por las carreteras españolas y sigue creciendo la red de estaciones de suministro de GNV para vehículos. Según cifras de Gasnam (Asociación Ibérica de Gas Natural para la Movilidad), las matriculaciones de vehículos propulsados con gas natural aumentaron más de un 133% en 2016 en España, hasta el punto de que el año pasado circularon 6.144 vehículos de este tipo en territorio nacional.
En 2016, el 56,8% de vehículos que se matricularon fueron diésel, frente al 40,2% de gasolina y el 3% de híbridos
Por su parte, la Comisión Europea, siguiendo el cumplimiento de la Directiva Europea 94/2014 relativa a la implantación de una infraestructura para los combustibles alternativos, aprobó recientemente financiar con 10 millones de euros el desarrollo del proyecto europeo ECO-GATE, un plan de acción global para el desarrollo de la movilidad con GNC y GNL en Europa, que lidera Gas Natural Fenosa a través de la distribuidora Gas Natural Madrid, que se encarga de dirigir y coordinar el proyecto.
Concretamente, España recibirá financiación para desarrollar gasineras en Barcelona, Burgos, Madrid, Murcia, Salamanca, Irún, Tordesillas, La Junquera, Córdoba y Cartagena, entre otras ciudades.
El proyecto europeo ECO-GATE es uno de los más ambiciosos en el mercado vehicular de gas natural convencional y renovable con despliegue de infraestructura a lo largo del Corredor Atlántico y el Corredor Mediterráneo a través de nuevas tecnologías y soluciones innovadoras.