En el año 2015 la ONU aprobó la Agenda 2030, un plan global compuesto por un total de 17 Objetivos planteados para mejorar la vida de todos, sin dejar a nadie atrás. Estos Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) pretenden solucionar problemas que van desde la pobreza al cambio climático, y promueven tanto la educación como la igualdad de género, la defensa del medio ambiente, la paz, la salud o el consumo responsable.
En definitiva, un plan mundial que implica a todos, (gobiernos, empresas y ciudadanos) que se basa en la colaboración para lograr una vida mejor para las generaciones futuras.
En el caso concreto de las empresas, en estos cuatro años hemos visto cómo compañías de distintos sectores han integrado estos ámbitos dentro de sus estrategias, priorizando aquellos ODS en los que cada una puede contribuir más directamente.
El sector energético, por la actividad que desarrolla, pone especial énfasis en la acción por el clima. De hecho, años antes de establecerse la Agenda 2030, en 2011, las principales compañías del sector dieron un paso importante con la creación de Funseam, una fundación privada sin ánimo de lucro configurada como un foro de discusión en torno a la sostenibilidad energética y ambiental. Un gesto que puso de manifiesto que el camino hacia ese modelo había comenzado y ya es imparable.
En palabras de Antonio Llardén, presidente de Funseam y de Enagás, “Las empresas hemos entendido que ya no basta con no tener impactos negativos, sino que se espera de nosotras que aportemos impactos positivos. La Agenda 2030 es la mejor vía a través de la cual conectar con el conjunto de la sociedad y contribuir al desarrollo sostenible, mejorando a la vez nuestras oportunidades de negocio y nuestra reputación”.
Para hacer que esa Agenda sea una realidad, el primer paso es lograr su visibilidad, que la sociedad conozca y entienda los objetivos. El segundo, es empezar a trabajar. Como recuerda Antonio Llardén, “aunque el primer reto de la Agenda 2030 está siendo darse a conocer, el verdadero desafío es pasar del discurso a la acción. Aterrizar los Objetivos de Desarrollo Sostenible y transformarlos en actuaciones concretas, que mejoren la vida de todos”.
¿Qué actuaciones concretas pueden aplicar las empresas para contribuir a la construcción de un mundo mejor para todos? Analizamos el caso de Enagás, TSO europeo y principal transportista de gas en España, para comprobar cómo está aterrizando los Objetivos de Desarrollo Sostenible en medidas reales que tengan un impacto positivo en el planeta y sus habitantes.
Como transportista de gas, Enagás contribuye con su actividad directamente a los ODS 7 y 9. Con su cultura corporativa, sus procesos internos y su manera de hacer las cosas, la compañía también ayuda a la consecución de los ODS 13, 8, 5, 15 y 17
El Objetivo de Desarrollo Sostenible número 7 (ODS 7) recoge la necesidad de garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para todas las personas. De aquí a 2030 la meta es conseguir un acceso universal a la energía, aumentar la proporción de renovables, mejorar la eficiencia, desarrollar e invertir en energías limpias y construir una infraestructura fiable y una tecnología resolutiva en países en desarrollo.
Tal y como indica el Plan de Acción para la Implementación de la Agenda 2030 del Gobierno de España, nuestro país no ha conseguido todavía desacoplar en términos absolutos el crecimiento de su economía de las emisiones de gases de efecto invernadero. En este sentido, la implantación de fuentes renovables traería beneficios, tanto económicos como medioambientales.
Enagás apuesta por las energías renovables no eléctricas, como el biogás/biometano y el hidrógeno como vector energético de futuro. La compañía impulsa estos gases renovables y ya ha firmado múltiples acuerdos con entidades públicas y privadas para promover su desarrollo.
Al mismo tiempo, Enagás apuesta por la movilidad sostenible basada en el gas natural, tanto terrestre como marítima y ferroviaria, para reducir las emisiones y mejorar la calidad del aire. El uso del gas en el transporte permite reducir las emisiones de NOx en torno a un 80-90%, las emisiones de CO2 un 20-30% y las de SOx y partículas prácticamente en un 100% con respecto a otros combustibles tradicionales.
Junto al ODS 7, el ODS 9 que atañe a la Industria, la Innovación y las Infraestructuras es otra de las metas fundamentales de Enagás. Con ella, se pretende construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación.
En este caso, Enagás contribuye al proceso de transición ecológica y descarbonización a través del desarrollo y gestión de infraestructuras energéticas. Tanto en España, al hacer posible el suministro de gas natural mediante su red de infraestructuras gasistas, como en el resto del mundo, contribuyendo al desarrollo energético de otros países como México, Chile, Perú, Italia, Albania, Grecia y Estados Unidos.
Evidentemente, la Agenda 2030 presta especial atención al clima, como apunta el ODS 13 de Acción por el clima, con el que se busca adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático. El reto global es reducir las emisiones contaminantes, para lo que la eficiencia energética es básica. Un ejemplo sería a través de las propias infraestructuras ya existentes, como hace Enagás al aprovechar la energía residual que se produce en los procesos de sus instalaciones para generar electricidad, lo que le ha permitido reducir en un 36% las emisiones de CO2 en el periodo 2016-2018 respecto a 2013–2015 y con lo que ha evitado la emisión de 1.768 tCO2e.
Las empresas tienen la responsabilidad de proteger el medio ambiente, tal y como define el ODS 15, al minimizar los impactos sobre él, mejorando el uso de los recursos naturales y desarrollando medidas orientadas a la conservación de la biodiversidad . En el desarrollo de sus infraestructuras, Enagás realiza actividades de protección y conservación de las especies de flora y fauna. Además, presta especial atención al reciclaje y la gestión de residuos para alcanzar una economía circular.
“Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos”. Es lo que reza la descripción del ODS número 8 que, al igual que el 5, está estrechamente relacionado con las personas y su bienestar.
Enagás contribuye a su consecución fomentando un empleo estable y de calidad (prácticamente el 100% de sus empleados son indefinidos) así como apostando por la conciliación, con más de 110 medidas. Entre las más destacadas, se encuentran el teletrabajo o los “Días sin cole”, que ofrecen una alternativa para el cuidado de los hijos/as en los días no lectivos del calendario escolar. También el programa de asistencia familiar, con servicios para los empleados y sus familiares directos como la teleasistencia, la telefarmacia o la ayuda en determinados trámites administrativos.
Todas estas medidas han permitido a Enagás conseguir la certificación Empresa Familiarmente Responsable (efr) y ser reconocida también como una de las mejores empresas para trabajar, según Top Employer.
En la Agenda 2030 encontramos también varios objetivos directamente enfocados a las personas, como es el caso del ODS 5: alcanzar la igualdad de género.
La igualdad real entre mujeres y hombres es un derecho jurídico universal, intrínseco a los derechos humanos, y el empoderamiento de la mujer es absolutamente necesario. Empresas como Enagás trabajan por identificar e impulsar el talento femenino, lo que ha permitido aumentar paulatinamente la presencia de mujeres en plantillas y puestos directivos.
La compañía ha puesto en marcha distintos programas de formación, desarrollo profesional y mentoring e iniciativas innovadoras, como Women In Networking (WIN Enagás), un foro de debate para potenciar el liderazgo femenino. También ha incrementado el número de mujeres trabajadoras, con un 31% entre directivas y pre-directivas. Todo esto ha contribuido a que Enagás haya sido reconocida como compañía líder en igualdad de género por distintas entidades, como Equileap.
La consecución de los objetivos anteriormente citados no podría alcanzarse de no divulgarlos y promoverlos, como promueve el ODS 17. Conscientes de ello, Enagás participa, entre otras iniciativas, en la campaña global #COMPANIES4SDGs, que promueve el conocimiento y la aplicación de los ODS y la Agenda 2030, a través de sus canales de comunicación interna y externa. Primero los comunica entre sus profesionales y posteriormente a la sociedad.
La compañía también se ha unido a la campaña #ODSéate, impulsada por el Alto Comisionado para la Agenda 2030, para dar a conocer los ODS en el cuarto aniversario de la adhesión de España a esta hoja de ruta.
El fin de la pobreza, el ‘hambre cero’, reducir las desigualdades entre países, garantizar la salud, fomentar la educación, garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua, facilitar acceso a la justicia para todos… son otros de los temas que aborda la Agenda 2030 y que recuerdan la esencia de este proyecto: garantizar el bienestar de las personas sin que nadie se quede atrás. Un reto para el que, como recuerda Antonio Llardén, es importante “sumar el esfuerzo de todos”, actuando cada uno de nosotros de manera responsable.