Camino de Santiago

El esfuerzo por mantener
1.200 años de respeto y hospitalidad

P. Pérez | 21/11/2020

Correos emprende una campaña para ayudar a mantener el Camino de Santiago limpio y concienciar al peregrino de la importancia de preservar unas rutas históricas
Una persona caminando por el Camino de Santiago

Desde el primer peregrino, hace más de 1.200 años, el Camino de Santiago ha dejado huella en los millones de caminantes que han pasado por él. Sin embargo, el respeto al Camino ha sido tanto, que el paso de multitudes no ha hecho que se deteriore. Del primer al último visitante comparten los principios del Camino.

Principios que las asociaciones de amigos del Camino de Santiago llevan años luchando por mantener sin pedir nada a cambio. Por eso, Correos pone su granito de arena y colabora con ellas mediante proyectos como #Caminosostenible, con el que intenta, aliándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (ODS) fijados en la Agenda 2030, mantener intacta la esencia de esta ruta de peregrinación, para muchos, la más importante del mundo.

01
La historia del Camino

Todo empezó hace tanto, que el tiempo parece hacernos olvidar. Cuenta la leyenda que Pelayo, un humilde pastor, sorprendido por un brillo inusual en el cielo que se repetía cada noche, avisó al obispo de Iria Flavia, Teodomiro, del extraño fenómeno.

Este, por la insistencia del primero, decidió ir a ver con sus propios ojos aquel suceso sobrenatural que tanto había sorprendido al joven. Las luces iluminaban, desde el cielo, un punto concreto en la tierra. Ambos decidieron acercarse. Allí, en el punto que señalaban las luces encontraron unos restos que el clérigo, sin lugar a dudas, identificó como los del apóstol Santiago.

Teodomiro corrió a Oviedo a contar el hallazgo a Alfonso II, el Casto. Desde allí, el rey decidió emprender el Camino para ver con sus propios ojos los restos del apóstol. Alfonso II se convertiría en el primer peregrino. Era el siglo IX, y el monarca recorrió lo que hoy se conoce como el Camino Primitivo.

02
Riqueza natural e histórica

Laureano García es presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago Astur-Galaico del Interior y conoce bien el Camino Primitivo. “De su paisaje natural destacaría todo el recorrido”, cuenta el presidente, “especialmente entre Grado y Lugo, todo es zona natural entre poblaciones muy pequeñas, con mucha vegetación y mucha arboleda”, explica García que hace hincapié en la Sierra de los Hospitales, un Camino antiguo con restos romanos y de restos de hospitales, de ahí su nombre.

Pero no todo es naturaleza, también hay historia en el recorrido. García destaca, entre otros, el Monasterio de San Salvador de Cornellana, un centro histórico con restos desde el paleolítico hasta el Imperio Romano y la Edad Media, o el templo benedictino de Santa María la Real de Obona.

La ruta de Alfonso el Casto sería la primera de las múltiples Rutas Jacobeas que llevan a la tumba de Santiago. Pero hay más. Una de ellas es el Camino Francés, que, descrito por el monje Aymeric Picaud en el famoso Códice Calixtino en el siglo XII, atraviesa la Sierra de los Ancares, reserva de la biosfera desde 2006 y la Sierra de Atapuerca, donde se encuentra el yacimiento arqueológico con el mismo nombre, uno de los más antiguos de Europa.

La mayor parte de los peregrinos optan por el Camino Francés. Sin embargo, son muchas las opciones para llegar al apóstol, y muchos los lugares que visitar. Un pequeño desvío desde el Camino del Norte, por ejemplo, nos permitirá llegar a la Playa de las Catedrales, un monumento natural con arcos de piedra de 30 metros de altura que empiezan en los acantilados y desaparecen en el mar. Y en la primera etapa del Camino Inglés, empezando desde Ferrol, muy próximo a las Fragas do Eume, uno de los bosques atlánticos mejor conservados de Europa, custodiado por toda una serie de leyendas de animalillos, duendes y brujas.

03
Valores humanos

El Camino de Santiago atraviesa poblaciones muy distintas pero todas comparten un denominador común: la hospitalidad. “A veces creemos que la hospitalidad es algo del siglo XXI, pero es algo que ya se trata en la Biblia. Los monasterios ya tenían un hospitalero”, explica Luis Gutiérrez, un enamorado del Camino que hace ya años que preside la Asociación Española de Federaciones de Amigos del Camino de Santiago. Desde la entidad luchan por mantener vivo el espíritu de las Rutas Jacobeas que radica precisamente en el respeto al Camino y la ayuda al prójimo. “Los valores del Camino son la hospitalidad, la convivencia y la fraternidad”, explica orgulloso Gutiérrez, que se ha convertido en un protector de los valores que enumera.

Como Gutiérrez, desde la asociación de Laureano García también hacen un trabajo para tratar de mantener el Camino de Santiago en las mejores condiciones. “Los peregrinos se comportan y hacemos campañas de sensibilización y de limpieza. También sensibilizamos a los vecinos del Camino para que lo cuiden, y eso ayuda a que los propios peregrinos también lo hagan”, explica el presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago Astur-Galaico del Interior.

Pero Gutiérrez no está solo en esta empresa, en la asociación tienen una base de datos de 5.000 hospitaleros voluntarios que se ofrecen, sin recibir nada a cambio, para ayudar a los peregrinos en su ruta hacia el sepulcro del Santo. Y, junto a esos voluntarios, Correos ayuda en la medida de lo posible: “Correos siempre ha ayudado a las asociaciones, en sus proyectos, en las jornadas jacobeas, porque las asociaciones son organizaciones de voluntariado puro”, cuenta el presidente que explica además la función que la empresa logística hace ayudando a quienes no pueden cargar con el peso de su mochila, a transportarla de un lado a otro.

Además de la humildad y los valores que los peregrinos comparten durante todo el trayecto, hay algo que va dentro de cada uno. “El Camino nos sirve para reflexionar y pensar qué hemos hecho hasta ahora y qué queremos hacer. Dicen que es entonces cuando el Camino ha sacado la riqueza interior de la persona y la pone a servicio de la sociedad” explica Gutierrez. Y concluye: “Es lo no material, el espíritu del Camino de Santiago, lo que estamos luchando para que se mantenga”.

Juan Carlos Pérez, presidente de la Fraternidad Internacional del Camino de Santiago, opina como Gutiérrez, pero va más allá: “Al final es una herencia milenaria, hemos conseguido revitalizar algo por lo que hay que luchar y que llegue incluso a declararse Patrimonio Mundial de la Humanidad Inmaterial”.

04
Camino sostenible

La iniciativa #Caminosostenible, de Correos, intenta promover los valores de un turismo sostenible en el ámbito de las Rutas Jacobeas, pero también en el día a día de las personas.

Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU promulgados en 2015 tienen el propósito de que los países mejoren sus condiciones de vida. En este caso, desde la compañía ayudan a concienciar de la importancia que tiene el respeto al Camino para seguir manteniendo la esencia y los valores que transmite desde hace 1.200 años.

En la página web, el peregrino podrá encontrar información sobre cómo trabajar para mantener el Camino limpio y promover los objetivos de desarrollo sostenible. También encontrará consejos para hacer el Camino: llevar una botella de agua reutilizable, tomar duchas cortas, disfrutar conociendo a otros peregrinos de diferentes culturas, creencias o edad… Y además, algunos trucos para aplicar en su día a día, cómo comprar productos locales, seguir el principio de “las 3 erres” (reducir, reutilizar, reciclar) o utilizar el transporte público.

05
Vídeos
Patrimonio
Personas
Medio Ambiente