Que los americanos llegaran en 1980 a Aragón para transformar un olivar tan grande como 25 campos de fútbol en la una factoría de automóviles puntera en un plazo de 899 días, con el objetivo de exportar la mayor parte de la producción desde un país que ni siquiera había ingresado en la CEE, al mismo tiempo que se formaba a más de 4.000 empleados en su mayoría provenientes del campo, parecía una apuesta arriesgada. Nada más lejos de la realidad, hoy Figueruelas es la planta de mayor producción de Opel, referencia mundial en materia de innovación y calidad, y ha superado holgadamente los 12'5 millones de turismos producidos. ¿El secreto? Mirar siempre hacia adelante.
Azotado por un cierzo que obligaba a subirse el cuello del tabardo, tal y como recogen las crónicas periodísticas de un lejano viernes 14 de marzo de 1980, el entonces presidente de la General Motors Corporation, Elliot Estes, plantaba un arbolito como símbolo de pervivencia del proyecto que echaba a rodar frente a centenares de vecinos de la zona de Figueruelas, Grisen, Pedrola y Zaragoza. Aquel día, hasta hubo perdonilla en los colegios, y la coca cola y las patatas fritas corrían como el champán. La General Motors llegaba buscando terrenos, energía, estabilidad política y miles de almas para montar un cochecito revolucionario: el Corsa. Y Pete Estes enfilaba el retiro de la compañía confiado en el éxito de su último proyecto: burlar a la crisis del petróleo con un modelo pequeño y moderno, para venderlo en todo el mundo.
Para tres generaciones de padres, hijos e incluso nietos de trabajadores de la planta, la vinculación con la marca va mucho más allá de la tranquilidad que otorga fichar cada día en la planta modelo de Opel en Europa: es una cuestión de orgullo personal. Y en ese compromiso es donde se ha apoyado, sin lugar a dudas, una serie de hitos en materia de innovación, producción, recursos humanos y calidad que ahora, 35 años después de su inauguración, dejan a Figueruelas como nueva punta de lanza en la futura etapa bajo propiedad francesa de la otrora división europea del gigante estadounidense.
Si echar a andar la producción con 614 millones de euros de los de 1982 era el no va más en inversiones privadas, consideradas en su tiempo como responsables del 1,1% del PIB español, los 5.000 millones dedicados hasta hoy constatan una reflexión sencilla: para ganar, hay que gastar. Observando antiguos gráficos, en el periodo de crisis comprendido entre 1992-1994, Figueruelas atrajo 559 millones de euros.
Pero es que antes, en 1988, se sacó de la manga un concepto nunca visto en una industria del sector: el tercer turno de trabajo, generando mil empleos directos más, y otros 4.000 puestos de trabajo indirectos. Establecer fórmulas de compra orientadas a la reducción de costes consiguió traer a Zaragoza el centro europeo de costes en 2001. El departamento de ergonomía recibió el máximo galardón de General Motors, el Chairman’s Award, por sus aportaciones a la mejora de las condiciones de trabajo. Y un equipo médico formado por 15 profesionales de la salud convirtieron su centro médico para empleados en el referente de la comarca: más de cuarenta infartos serios tratados en la planta y hasta un bebé recibido de urgencia en muerte súbita hablan por sí mismos.
La factoría de Figueruelas organiza dentro de su recinto, de casi cinco kilómetros de perímetro, cinco plantas independientes que suman más de tres millones de metros cuadrados. Cada una, en su particular aportación al vehículo completo, han evolucionado en sus tareas hasta convertirse en referentes de innovación y tecnología. Prensas, Carrocerías, Pintura, Ensamblaje, Acabado final y Logística, tienen historias particulares que conocer.
Elliot Estes, el entonces presidente de General Motors Corporation, plantaba un arbolito como símbolo de pervivencia del proyecto que echaba a rodar frente a centenares de vecinos de la zona de Figueruelas, Grisen, Pedrola y Zaragoza.
Arranca la producción del primer Opel Corsa en Figueruelas.
Sale de la línea 1 el Opel Corsa 1.000.000. Blanco, acabado Luxus tres puertas.
En vísperas de la Navidad, sale el Corsa 4.000.000. Un “C” de color azul celeste.
Se anuncia la producción en exclusiva para todo el mundo del Meriva, un monovolumen diseñado sobre la base del Corsa C (2003-2010).
Se firma el Plan Industrial de General Motors en España. La planta aragonesa se consolida como líder para la compañía estadounidense de automóviles.
Figueruelas alcanza unas cifras de producción históricas: 487.000 unidades
Un Opel Corsa rojo de quinta generación, acabado Color Edition, suma la unidad 12.000.000.
Tras su alianza con el grupo PSA, sale de producción el primer Crossland X.